Colección: Los suplementos más eficaces para el estrés y la depresión

¿Qué son los suplementos alimenticios para el estrés y la depresión?

Los suplementos para el estrés y la depresión son un amplio grupo de sustancias esenciales, cuyo desequilibrio ha demostrado estar asociado con un mayor riesgo de trastornos depresivos. Estos incluyen algunas vitaminas, minerales y otros compuestos indispensables para nuestro cuerpo.

¿Qué función cumplen en el cuerpo humano?

Los suplementos contra el estrés y la depresión cumplen sus funciones a través de diferentes mecanismos:

• Ayudan a equilibrar los niveles de neurotransmisores. Algunos suplementos ayudan a regular la serotonina, la dopamina y la noradrenalina, claves para mejorar el estado de ánimo y reducir los síntomas de ansiedad y depresión.
• Reducen la inflamación.
• Apoyan el funcionamiento de las glándulas suprarrenales y regulan los niveles de cortisol.
• Promueven los procesos de neuroplasticidad, es decir, la capacidad del cerebro para formar nuevas conexiones neuronales, ayudando así a regular la respuesta del cuerpo al estrés.
• Pueden equilibrar los niveles de cortisol, adrenalina y hormonas tiroideas, que pueden alterarse durante períodos de estrés elevado.

Tipos de suplementos para el estrés y la depresión

Existen sustancias reconocidas por la ciencia, cuya deficiencia puede llevar a la depresión, como algunas de las siguientes:

Vitamina D3 (colecalciferol)

Esta sustancia es liposoluble y, de hecho, la ciencia coincide en que se trata más de una hormona que de una vitamina. Nuestro cuerpo puede sintetizarla a través de la piel con la ayuda de la luz solar y obtenerla en pequeñas cantidades a través de la alimentación.

Sin embargo, las estadísticas indican que esta vitamina es deficitaria en hasta el 40% de la población de Europa, en promedio. Esto se debe al clima templado, que produce inviernos relativamente largos y menor exposición solar.

La falta de vitamina D3 ha demostrado estar relacionada con la aparición de depresión. Los investigadores han encontrado receptores de colecalciferol en el cerebro. Esta vitamina participa directamente en la síntesis de los neurotransmisores serotonina y noradrenalina, cuya deficiencia es la base de los trastornos depresivos.

No es casualidad que las estadísticas muestren un porcentaje significativamente mayor de suicidios en los países del norte en comparación con el resto de Europa.

Los médicos recomiendan el consumo preventivo de vitamina D3 para todas las personas, especialmente durante los meses de invierno. Además de proporcionar huesos, dientes, encías y sistema inmunológico sanos, esta vitamina ayuda a mantener la depresión alejada.

Vitamina B12

La vitamina B12 es una vitamina hidrosoluble, también llamada cianocobalamina, que es esencial, es decir, nuestro cuerpo no puede producirla por sí mismo. Cumple múltiples funciones importantes, entre ellas la síntesis del neurotransmisor serotonina.

Se ha establecido que la deficiencia de esta vitamina provoca bajo estado de ánimo, niveles bajos de energía y puede llevar a estados depresivos.

Las estadísticas muestran que el porcentaje de la población mundial con deficiencia de vitamina B12 varía del 3% al 35%, dependiendo de los países.

Las fuentes de esta vitamina son las carnes rojas, las vísceras, los mariscos y algunas legumbres.

Las personas con gastritis crónica a menudo sufren de deficiencia de esta vitamina debido a que no producen el Factor Intrínseco Gástrico, necesario para la absorción de la vitamina B12.

Otras vitaminas del grupo B importantes para la salud del sistema nervioso central (SNC) y la prevención de la depresión son la vitamina B6 (piridoxina) y la vitamina B9 (folato).

Hierro

Este microelemento es de gran importancia para el cuerpo. Gracias a él, los glóbulos rojos pueden transportar átomos de oxígeno a diferentes órganos y tejidos, a través de la proteína transportadora hemoglobina, que contiene el átomo de hierro en su composición.

Además de sus funciones hematopoyéticas y de transporte, el hierro desempeña un papel importante en el sistema nervioso central (SNC).

El hierro es cofactor de dos enzimas: la tirosina hidroxilasa y la triptófano hidroxilasa, responsables, respectivamente, de la síntesis de dopamina y serotonina.

Cuando hay anemia por deficiencia de hierro, además de síntomas como fatiga fácil, debilidad y dificultad para respirar al hacer ejercicio, casi siempre se presentan estados de ánimo bajo y depresión.

Una ingesta adecuada de hierro se puede asegurar mediante el consumo de carnes rojas y productos de origen animal en general. Los vegetarianos, veganos, mujeres y personas con trastornos alimenticios son el grupo con mayor riesgo de sufrir deficiencia de este importante elemento.

El consumo de cantidades adecuadas de hierro asegura la actividad de ambas enzimas que participan en la síntesis de dopamina y serotonina, lo que puede ayudar a prevenir el desarrollo de la depresión.

Es importante señalar que para la absorción de hierro se necesita otro micronutriente esencial: la vitamina C. Los expertos han comprobado que la deficiencia de vitamina C conduce a alteraciones en el estado de ánimo y síntomas de depresión.

Zinc

El zinc es un microelemento esencial que el cuerpo necesita en cantidades muy pequeñas. Es uno de los suplementos más efectivos para el estrés y la depresión y desempeña un papel vital en el funcionamiento de nuestro organismo, participando en numerosos procesos que contribuyen a nuestra salud general.

Este microelemento interviene en la regulación de los niveles de una proteína llamada Factor Neurotrófico Derivado del Cerebro (BDNF, por sus siglas en inglés), que es de gran importancia para la salud cerebral. Pertenece al grupo de las neurotrofinas, proteínas que apoyan el crecimiento y correcto funcionamiento de las neuronas en el cerebro.

Se ha establecido una relación directa entre los niveles de esta proteína y los niveles de serotonina y dopamina. En personas que padecen depresión o están sometidas a un alto nivel de estrés se observan bajos niveles de BDNF. El zinc se encuentra en cantidades adecuadas en las carnes rojas y los mariscos, pero en veganos o personas con trastornos alimenticios, sus niveles en el suero a menudo se encuentran en el límite inferior.

Magnesio

El magnesio es otro microelemento importante, que participa en la estructura de miles de enzimas y en la realización de diversas funciones. También desempeña un papel esencial en la conducción de impulsos nerviosos, regula la actividad de los canales de calcio y el transporte de sustancias entre las células.

El magnesio tiene un efecto calmante sobre el sistema nervioso, siendo útil en casos de estrés, ansiedad y tensión nerviosa y psicológica elevada. Se estima que entre el 10 y el 30% de la población en los países desarrollados padece una deficiencia subclínica de magnesio.

La deficiencia subclínica de magnesio significa que el cuerpo no recibe los niveles óptimos de magnesio que necesita, aunque no se presentan síntomas específicos intensos.

No obstante, las personas con una leve deficiencia pueden experimentar ansiedad, inquietud, fatiga y alteraciones en el estado de ánimo.

Por ello, el magnesio es uno de los suplementos alimenticios más buscados a nivel mundial, ya que su consumo adicional no se asocia con efectos secundarios, pero en cambio, aporta decenas de beneficios para la salud humana.

Ácidos grasos Omega 3

Estos compuestos lipídicos son ácidos grasos esenciales solubles en grasa que obtenemos de nuestra dieta, principalmente de pescados de agua fría, algunos frutos secos y el aguacate.

Los ácidos grasos Omega 3 desempeñan muchas funciones en nuestro organismo, y son especialmente importantes para el desarrollo y funcionamiento adecuado de nuestro sistema nervioso.

Mejoran el flujo sanguíneo en el cerebro y tienen un efecto neuroprotector, es decir, protegen el cerebro de los efectos nocivos de los radicales libres que se acumulan con altos niveles de estrés.

El DHA (ácido docosahexaenoico) es el ácido graso Omega 3 más abundante en el tejido cerebral. Existe una estrecha relación entre sus niveles en el cerebro y las funciones cognitivas, y se ha demostrado su papel en la regulación de los niveles de neurotransmisores.

Por esta razón, los ácidos grasos Omega 3 son frecuentemente recomendados por los médicos en forma de suplemento dietético. Son una opción que no deja margen de error y su alta ingesta contribuye al buen estado de salud del organismo.

Se considera que las personas que padecen trastornos depresivos se benefician favorablemente de la ingesta de ácidos grasos Omega 3.

Los elementos mencionados hasta ahora son indispensables, sin los cuales la vida en nuestro organismo no podría ocurrir. Mantenerlos en valores de referencia óptimos es de importancia estadísticamente significativa tanto para la salud en general como para la prevención de estados depresivos.

¿Qué hierbas o tinturas herbales son adecuadas para el estrés y la depresión?

Además de los micronutrientes esenciales, a lo largo de su desarrollo evolutivo, la humanidad ha descubierto dones naturales que le ayudan a lidiar con el estrés y la depresión, en forma de plantas.

Varias plantas poseen propiedades curativas y contienen altos niveles de compuestos biológicamente activos beneficiosos para las personas. Algunas de ellas tienen un efecto especialmente favorable sobre la salud del sistema nervioso.

La medicina tradicional, así como la ciencia moderna, han identificado estas capacidades y, hasta la fecha, existen datos sólidos sobre el papel beneficioso de algunas de ellas.

Ashwagandha

La ashwagandha, también conocida como ginseng indio, se considera una panacea en la cultura de algunos pueblos orientales y es una hierba fundamental en la medicina ayurvédica de la India.

Esta planta pertenece al grupo de los adaptógenos, es decir, plantas que poseen la capacidad de fortalecer el organismo en periodos de estrés físico y mental elevado.

La conclusión de la ciencia es que la ashwagandha reduce los niveles de cortisol, la hormona del estrés más potente, y ayuda a disminuir el estrés oxidativo. Esta hierba bloquea la actividad del sistema nervioso en lo que respecta a estados de ansiedad, insomnio y depresión clínica.

Maca

La maca es otra hierba adaptógena, originaria de América del Sur. En los Andes peruanos, donde crece esta planta de gran altitud, se utiliza tanto como cultivo alimenticio como planta medicinal.

Sus funciones son numerosas, ya que se considera que influye en el equilibrio energético del cuerpo y aumenta la resistencia del organismo frente a esfuerzos físicos y mentales. Es un hecho comprobado que el uso prolongado de maca eleva los niveles de dopamina en el sistema nervioso. Esto mejora el estado de ánimo y tiene un efecto positivo en estados de ansiedad y depresión.

Romero

Una planta muy popular, con una amplia aplicación en la cocina, especialmente en los países mediterráneos, así como en la cosmética, debido a su aroma característico.

El romero es, en realidad, un representante muy interesante de las plantas medicinales, ya que posee propiedades antioxidantes, antiinflamatorias, antimicrobianas, analgésicas y neuroprotectoras.

Los datos científicos indican que el romero, al igual que la lavanda (otra hierba de la misma familia), tiene la capacidad de regular los niveles de la hormona cortisol, que suelen estar elevados en situaciones de estrés.

El romero es rico en antioxidantes y reduce el estrés oxidativo en el tejido nervioso. Además, los estudios sugieren que tiene un efecto positivo en las habilidades cognitivas y ayuda a aliviar la ansiedad y mejorar el estado de ánimo.

El extracto de romero tiene una función beneficiosa sobre la memoria, y las investigaciones muestran que es eficaz para reducir la gravedad de los estados depresivos.

El mecanismo de acción propuesto, según los científicos, es que el romero regula los procesos de metilación, es decir, la adición de un grupo metilo al ADN, proteínas y neurotransmisores.

Hierba de San Juan

Ahora llegamos al antidepresivo natural más potente y comprobado: la hierba de San Juan.

Esta planta medicinal ha demostrado tener efectos beneficiosos en diversos aspectos de la salud, pero es más conocida por sus propiedades antidepresivas.

Diversos estudios muestran que los efectos antidepresivos que expresa el extracto de hierba de San Juan se deben a las propiedades de sus componentes activos.

Se cree que las sustancias del grupo de los naftodiantronas, como la hipericina y la pseudo-hipericina, así como la hiperforina y la adhiperforina, miembros del grupo de los floroglucinoles, actúan como inhibidores triples de la recaptación de los neurotransmisores serotonina, dopamina y noradrenalina.

Esto hace que el extracto de esta planta sea muy similar, e incluso casi idéntico, al funcionamiento de los antidepresivos sintéticos.

¿Cuándo se recomienda tomar suplementos para el estrés y la depresión?

En conclusión, es importante resumir que el estilo de vida moderno tiende a promover el desarrollo de trastornos de ansiedad y depresión, causados por las altas demandas socioeconómicas, el intenso estrés y la falta de descanso adecuado.

Optimizar diferentes aspectos de nuestra vida contribuye a mejorar la capacidad de nuestro organismo para hacer frente a los factores adversos.

La alimentación juega un papel crucial en nuestra salud general, tanto física como mental. Una nutrición adecuada aporta una serie de vitaminas y minerales esenciales que son primordiales para la regulación de la homeostasis.

La actividad física es otro aspecto fundamental que depende de nuestra motivación y objetivos. La salud física proporciona una base sólida para la resiliencia y flexibilidad de nuestro sistema nervioso.

Los suplementos alimenticios se están convirtiendo en una parte esencial de nuestra vida. Pueden contribuir a la función del organismo, aportando aquellos elementos que cada vez son más difíciles de obtener sólo a través de la dieta.

Ante las influencias perjudiciales del entorno moderno, la incorporación de suplementos y extractos herbales de eficacia comprobada puede tener un gran impacto en nuestra capacidad para desempeñarnos en las actividades diarias.

Gestionar los niveles elevados de estrés y la creciente frecuencia de los trastornos de ansiedad y depresión es un aspecto fundamental de la salud psicoemocional, y es nuestra responsabilidad abordarlo adecuadamente.

La incorporación de suplementos para combatir el estrés y la depresión es una forma natural de equilibrar los niveles de neurotransmisores, evitando los efectos secundarios de los antidepresivos.

¿Por qué elegir los suplementos para el estrés y la depresión de VitaOn?

Nuestras propuestas de suplementos para combatir el estrés y la depresión están respaldadas por investigaciones científicas que demuestran su eficacia para enfrentar estos problemas.

Son sustancias esenciales para nuestro organismo, cuya deficiencia se asocia con cambios psicológicos y de comportamiento de diversa índole.

Las tinturas y extractos herbales de alta concentración contienen compuestos con afinidad hacia el sistema nervioso central, capaces de regular la síntesis y el metabolismo de los neurotransmisores, además de mostrar propiedades neuroprotectoras.

Los suplementos de VitaOn son de alta calidad y se producen con materias primas cuidadosamente seleccionadas, para ofrecerte un producto impecable que respalde tu salud.

Preguntas frecuentes

¿Cuáles son los beneficios de los suplementos para el estrés y la depresión?

Estos suplementos ayudan a regular el metabolismo de los neurotransmisores en el cerebro y protegen el sistema nervioso del efecto dañino de los radicales libres.

¿Tienen efectos secundarios los suplementos para el estrés y la depresión?

No, a diferencia de los antidepresivos sintéticos, las hierbas no presentan efectos secundarios como adicción, alteraciones de la libido o aumento de peso.

¿Cuándo se pueden esperar los efectos de este tipo de suplementos?

Algunos de ellos, como la Hierba de San Juan, la ashwagandha y el romero, actúan relativamente rápido, y los efectos pueden notarse ya en la primera semana de uso regular.