- Infecciones, inflamaciones y enfermedades de las vías respiratorias superiores (VRS)
- Enfermedades infecciosas de las vías respiratorias inferiores
- Suplementos adecuados para la inmunidad
- ¿Cómo distinguir los problemas de las vías respiratorias superiores e inferiores?
- Posibles complicaciones
- Posibilidades de tratamiento
- ¿Cuándo consultar a un médico?
- Preguntas frecuentes
Las infecciones respiratorias o, en otras palabras, las infecciones del sistema respiratorio abarcan condiciones inflamatorias de las vías respiratorias superiores e inferiores, causadas por virus, bacterias u hongos. Estas varían desde resfriados leves hasta neumonías graves, pudiendo afectar tanto la nariz y la garganta como los pulmones.
Se propagan más comúnmente por vía aérea, y factores de riesgo como un sistema inmunológico debilitado, enfermedades crónicas y aire contaminado aumentan la probabilidad de desarrollar complicaciones.
Infecciones, inflamaciones y enfermedades de las vías respiratorias superiores (VRS)

Las vías respiratorias superiores (VRS) incluyen la nariz, los senos paranasales, la garganta y la laringe, y sus infecciones e inflamaciones son frecuentes y pueden ser causadas por diversos patógenos o irritantes.
Las infecciones de las VRS son más comúnmente virales (resfriado, influenza) o bacterianas (faringitis estreptocócica, sinusitis) y se manifiestan con síntomas como nariz tapada, dolor de garganta, tos y fiebre.
Las condiciones inflamatorias, como rinitis, tonsilitis y laringitis, pueden ser desencadenadas por infecciones, alergias o contaminantes y suelen causar dificultad para respirar, dolor e hinchazón de los tejidos afectados.
Entre las enfermedades de las VRS destacan las formas crónicas de sinusitis, tonsilitis y faringitis, que pueden llevar a complicaciones como infecciones bacterianas secundarias o la propagación de la inflamación hacia las vías respiratorias inferiores.
Infecciones agudas de las vías respiratorias superiores
Las infecciones agudas de las vías respiratorias superiores son las enfermedades más comunes de las VRS, causadas por agentes infecciosos como virus, bacterias y, mucho más raramente, hongos.
Estas infecciones incluyen:
- Infecciones virales - los virus son los agentes causales más comunes de las infecciones de las VRS. Ejemplos de dichos virus son el rinovirus (causante del resfriado), la influenza (Influenza A, B), parainfluenza e infecciones por adenovirus. Sus síntomas son bien conocidos: secreciones nasales, tos, nariz tapada, dolor de garganta y fiebre.
- Infecciones bacterianas - son significativamente más raras y suelen desarrollarse de manera secundaria tras una infección viral previa, con ejemplos como la faringitis estreptocócica, la sinusitis bacteriana, etc. Los síntomas incluyen fatiga general, fiebre, placas purulentas en la garganta y ganglios linfáticos inflamados.
- Infecciones fúngicas - las enfermedades infecciosas más raras de las VRS, que se desarrollan principalmente tras un tratamiento antibiótico prolongado o en pacientes con inmunidad reducida. Ejemplos incluyen la faringitis candidiásica y la sinusitis aspergilósica. Los síntomas incluyen placas blancas características en las mucosas, ardor y malestar.
Enfermedades inflamatorias de las VRS
Es importante destacar que las enfermedades inflamatorias pueden ser infecciosas o no infecciosas.
Estas enfermedades inflamatorias incluyen:
- Rinitis – inflamación de la mucosa nasal, que puede ser un síntoma de una infección (viral o bacteriana) o ser causada por alérgenos (fiebre del heno, alergias al polvo). También existe la rinitis vasomotora, cuyo mecanismo patogénico es poco claro y se presume que es desencadenada por el frío o incluso el estrés.
- Sinusitis – inflamación de los senos paranasales, que puede ser un síntoma de una infección general de las VRS o una enfermedad separada, especialmente en su forma crónica, es decir, una inflamación persistente durante más de 12 semanas, que puede ser bacteriana o alérgica, pero no viral.
- Faringitis – inflamación de la garganta. Puede ser un síntoma de un resfriado, más comúnmente en infecciones virales (más del 90% de los casos) o bacteriana, causada por bacterias como los estreptococos.
- Tonsilitis – inflamación de las amígdalas, que puede formar parte del complejo de síntomas de las infecciones virales (lo más común) o ser de origen bacteriano.
- Laringitis – inflamación de las cuerdas vocales. La forma aguda es a menudo viral, mientras que las formas crónicas se deben a una irritación prolongada por factores externos u otros, como el tabaquismo o el reflujo gastroesofágico (GERD).
Enfermedades crónicas de las VRS
Las enfermedades crónicas son de larga duración o frecuentemente recurrentes.
Las enfermedades crónicas más comunes de las VRS incluyen:
- Rinosinusitis crónica – inflamación prolongada de la mucosa nasal y los senos paranasales.
- Tonsilitis crónica – infecciones amigdalinas recurrentes, que llevan a hipertrofia y la necesidad de tonsilectomía.
- Pólipos nasales y sinusales – inflamación crónica no infecciosa, común en alergias.
- Apnea obstructiva del sueño – puede estar relacionada con cambios anatómicos o inflamatorios.
Enfermedades infecciosas de las vías respiratorias inferiores
Estas enfermedades infecciosas afectan las secciones inferiores del sistema respiratorio humano – tráquea, bronquios y pulmones, y son significativamente más graves que las de las VRS.
Los agentes infecciosos pueden ser virales, bacterianos o fúngicos, pero los síntomas son diferentes, y la probabilidad de complicaciones es significativamente mayor.
Infecciones virales

Las infecciones virales, como enfermedades del sistema respiratorio, son las más comunes en las vías respiratorias inferiores (VRI), con un curso generalmente más leve que las demás.
Sin embargo, en las enfermedades infecciosas virales que afectan las vías respiratorias inferiores también pueden ocurrir complicaciones y consecuencias graves. Factores como la edad, el estado general, la presencia de enfermedades asociadas y factores genéticos juegan un papel importante.
Las infecciones virales de las vías respiratorias inferiores pueden ser:
- Influenza (Influenza A, B, C) – infección viral aguda con fiebre alta, tos y dolores musculares.
- Virus respiratorio sincitial (RSV) – principal causa de bronquiolitis y neumonía en bebés.
- Infecciones por coronavirus (SARS, MERS, COVID-19) – varían desde neumonías leves hasta graves y síndrome de distrés respiratorio agudo (ARDS).
- Virus parainfluenza – conducen a bronquitis y crup (laringotraqueobronquitis) en niños.
Infecciones bacterianas
Las infecciones bacterianas son más raras, pero suelen tener un curso más grave y presentan un mayor riesgo de complicaciones, ya que la recuperación espontánea del organismo es imposible y sin antibióticos puede llevar a un desenlace fatal.
Estas infecciones bacterianas incluyen:
- Neumonía neumocócica (Streptococcus pneumoniae) – la neumonía bacteriana más común.
- Neumonía atípica (Mycoplasma pneumoniae, Chlamydia pneumoniae, Legionella pneumophila) – con un curso más leve, pero más difícil de diagnosticar.
- Tuberculosis (Mycobacterium tuberculosis) – infección bacteriana crónica que afecta los pulmones.
Infecciones fúngicas
Las infecciones fúngicas son las menos comunes en las VRI, observadas principalmente en pacientes inmunosuprimidos y aquellos en ventilación mecánica o en tratamiento antibiótico sistémico.
Estas infecciones fúngicas incluyen:
- Aspergilosis (Aspergillus spp.) – lleva a necrosis pulmonar en pacientes con inmunidad debilitada.
- Candidiasis pulmonar – ocurre en pacientes con terapia antibiótica prolongada.
- Histoplasmosis, coccidioidomicosis – se encuentran en áreas endémicas.
Enfermedades inflamatorias de las VRI

Al igual que en las enfermedades de las VRS, la inflamación de las vías respiratorias inferiores puede tener un origen infeccioso o no infeccioso.
Dependiendo de qué órganos del sistema respiratorio están afectados por el proceso inflamatorio, se distinguen:
- Bronquitis – inflamación de los bronquios.
- Bronquitis aguda – generalmente viral, con tos productiva y sibilancias.
- Bronquitis crónica – parte de la EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica), relacionada con el tabaquismo.
- Bronquiolitis – inflamación de las pequeñas bronquiolos, principalmente en bebés (más comúnmente causada por RSV).
- Neumonía – inflamación del parénquima pulmonar.
- Neumonía bacteriana aguda – neumonía lobar clásica (S. pneumoniae).
- Neumonía atípica – más leve, con infiltrado intersticial (Mycoplasma pneumoniae).
- Neumonía por aspiración – causada por la inhalación de alimentos/líquidos, común en enfermedades neurológicas.
- Enfermedades pulmonares intersticiales (EPI) – condiciones inflamatorias crónicas con fibrosis.
- Fibrosis pulmonar idiopática – deterioro progresivo de la función pulmonar.
- Sarcoidosis – inflamación granulomatosa con etiología desconocida.
Enfermedades crónicas y estructurales de las VRI
Estas son enfermedades que se desarrollan durante un largo período de tiempo y progresan gradualmente. No tienen un origen infeccioso, pero conducen a la aparición de problemas respiratorios y, posteriormente, a trastornos sistémicos.
Las enfermedades crónicas y estructurales incluyen:
- Enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) – la EPOC engloba dos condiciones: bronquitis crónica y enfisema, siendo la principal causa el tabaquismo. Los síntomas incluyen disnea progresiva y tos.
- Asma bronquial – enfermedad inflamatoria atópica con carácter crónico, desencadenada por alérgenos y caracterizada por exhalación prolongada y broncoespasmo.
- Bronquiectasias – dilataciones patológicas de los bronquios, que llevan a una ventilación reducida y predisponen a infecciones crónicas. Son más comunes en la fibrosis quística, pero pueden ocurrir también como resultado de infecciones crónicas previas.
- Embolia pulmonar – condición aguda causada por la obstrucción de la arteria pulmonar con un trombo, que se manifiesta dramáticamente con disnea repentina, dolor torácico y hemoptisis en los casos más graves.
- Hipertensión pulmonar – presión elevada en las arterias pulmonares, que lleva a insuficiencia cardíaca.
Suplementos adecuados para la inmunidad
¿Cómo distinguir los problemas de las vías respiratorias superiores e inferiores?
Las enfermedades respiratorias pueden afectar tanto las vías respiratorias superiores (VRS) como las inferiores (VRI). Distinguirlas es importante para un diagnóstico y tratamiento correctos. Las principales diferencias se encuentran en los síntomas, las estructuras anatómicas afectadas y la gravedad de la enfermedad.
Puedes ver los principales síntomas para cada parte del sistema respiratorio resumidos en la tabla a continuación.
Localización | Estructuras Afectadas | Síntomas Principales |
---|---|---|
Tracto Respiratorio Superior (Nariz/Senos) | Nariz, senos paranasales | Rinorrea, congestión nasal, estornudos Dolor localizado en la frente o alrededor de la nariz (en sinusitis) |
Tracto Respiratorio Superior (Faringe/Laringe) | Faringe, laringe | Dolor de garganta, dificultad para tragar Ronquera o pérdida temporal de la voz Tos leve, generalmente seca |
Tracto Respiratorio Inferior | Tráquea, bronquios, bronquiolos, pulmones | Tos profunda y húmeda con flema Sibilancias, dificultad para respirar, opresión torácica Disnea, especialmente durante el esfuerzo físico Dolor torácico al respirar o toser Temperatura elevada (en infecciones, especialmente neumonía) Cianosis de labios o dedos (en casos graves) |
Posibles complicaciones
Si las infecciones o inflamaciones respiratorias no se tratan a tiempo o si el organismo de la persona afectada tiene defensas reducidas, pueden surgir complicaciones graves.
Estas varían dependiendo de la parte del sistema respiratorio afectada y la causa primaria de la enfermedad.
Complicaciones de las infecciones e inflamaciones de las vías respiratorias superiores (VRS)
En las vías respiratorias superiores, las complicaciones pueden ser diversas y afectar cualquier parte del sistema.
Las complicaciones incluyen:
- Sinusitis – las infecciones no tratadas de la cavidad nasal pueden extenderse a los senos paranasales, llevando a sinusitis crónica o incluso celulitis orbitaria (infección de la órbita ocular).
- Otitis – propagación de la infección al oído medio, lo que puede llevar a una pérdida temporal o permanente de la audición.
- Absceso tonsilar – infección bacteriana grave de las amígdalas, que requiere drenaje o intervención quirúrgica.
- Laringitis aguda – puede causar estridor (respiración sibilante) y dificultad para respirar, especialmente en niños.
- Propagación de la infección – por ejemplo, la angina estreptocócica puede llevar a fiebre reumática o glomerulonefritis postestreptocócica.
Complicaciones de las infecciones e inflamaciones de las vías respiratorias inferiores (VRI)
En las vías respiratorias inferiores también se observan complicaciones graves si no se busca ayuda médica a tiempo.
Las complicaciones pueden incluir:
- Neumonía – infección bacteriana, viral o fúngica, que puede llevar a insuficiencia respiratoria grave.
- Pleuritis y derrame pleural – inflamación de la pleura (la membrana de los pulmones), que puede causar dolor al respirar y acumulación de líquido en la cavidad pleural.
- Insuficiencia respiratoria – las infecciones graves, especialmente en pacientes con enfermedades crónicas como EPOC o asma, pueden llevar a hipoxia grave y la necesidad de oxigenoterapia o ventilación mecánica.
- Sepsis – en los casos más graves, la infección bacteriana puede entrar en el torrente sanguíneo, causando sepsis – una condición potencialmente mortal con insuficiencia multiorgánica.
- Absceso pulmonar – colección de pus en el pulmón, que requiere terapia antibiótica prolongada o drenaje.
Complicaciones en las enfermedades respiratorias crónicas

Las complicaciones en las enfermedades crónicas también pueden causar consecuencias permanentes en el sistema respiratorio.
Las complicaciones incluyen:
- Bronquitis crónica y EPOC – las infecciones recurrentes pueden llevar a inflamación crónica, daño irreversible a los pulmones y dependencia de oxígeno.
- Estado asmático – exacerbación grave del asma, que puede ser fatal si no se trata a tiempo.
- Fibrosis pulmonar – los procesos inflamatorios prolongados pueden llevar a la formación de tejido cicatricial en los pulmones, reduciendo permanentemente la capacidad respiratoria.
Posibilidades de tratamiento
El tratamiento de las infecciones e inflamaciones respiratorias depende del tipo de infección, la gravedad de los síntomas y el estado general del paciente.
El tratamiento puede incluir la administración de diferentes grupos de medicamentos, pero también puede ser no farmacológico, y en algunos casos requiere enfoques quirúrgicos.
Tratamiento de las infecciones de las vías respiratorias superiores (VRS)
Para el tratamiento de las infecciones de las vías respiratorias superiores se pueden adoptar varios enfoques.
Si el agente causal es bacteriano, los antibióticos pueden usarse para eliminar la infección. La elección del antibiótico depende de la bacteria causante.
Generalmente se utilizan medicamentos antiinflamatorios no esteroideos como ibuprofeno y paracetamol. Estos alivian el dolor y reducen la inflamación.
Medicamentos como descongestionantes y antihistamínicos pueden usarse para reducir la hinchazón de las vías nasales y aliviar los síntomas de secreción nasal.
Para las infecciones de la garganta y las amígdalas, se pueden usar aerosoles o hacer gárgaras con sustancias antisépticas, como clorhexidina o soluciones salinas.
Es importante que el paciente descanse lo suficiente y consuma grandes cantidades de líquidos para facilitar la recuperación y prevenir la deshidratación.
Tratamiento de las infecciones de las vías respiratorias inferiores (VRI)
En las vías respiratorias inferiores, dependiendo del tipo de infección – bacteriana o viral – se administran antibióticos o medicamentos antivirales. En caso de neumonía bacteriana o bronquitis, los antibióticos son obligatorios, mientras que en infecciones virales pueden recetarse medicamentos antivirales.
Analgésicos y antipiréticos se utilizan para aliviar el dolor torácico y reducir la fiebre. Estos incluyen medicamentos como paracetamol o ibuprofeno.
En pacientes con sibilancias y vías respiratorias estrechas, especialmente en asma o bronquitis crónica, se recetan medicamentos como inhaladores con broncodilatadores (por ejemplo, salbutamol) para ensanchar las vías respiratorias.
En procesos inflamatorios graves que no responden a otros medicamentos, se pueden usar corticosteroides inhalados o sistémicos para reducir la inflamación y aliviar la respiración.
Para infecciones graves, puede ser necesaria la ventilación mecánica u oxigenoterapia si se desarrolla insuficiencia respiratoria.
Al igual que en las infecciones de las VRS, también aquí es importante mantener una buena hidratación y descansar lo suficiente para estimular la recuperación de los pulmones.
Tratamiento de las inflamaciones de las vías respiratorias

Para las inflamaciones de las vías respiratorias, se recetan diferentes medicamentos, dependiendo del estado del paciente. Los antiinflamatorios no esteroideos como ibuprofeno o paracetamol pueden usarse para reducir la inflamación y el dolor.
Las inhalaciones con solución salina pueden ayudar a hidratar las vías respiratorias y aliviar síntomas como tos seca o dificultad para respirar.
Algunos preparados con hierbas como orégano, tomillo o regaliz pueden usarse para apoyar el tratamiento farmacológico, pero no lo reemplazan.
Los corticosteroides son necesarios en inflamaciones crónicas y pueden recetarse como inhalaciones.
Tratamiento de las enfermedades crónicas (EPOC, asma, fibrosis pulmonar)
En las enfermedades pulmonares crónicas, el tratamiento varía según el estado específico de los pacientes. En la EPOC, el tratamiento incluye el uso de broncodilatadores y esteroides inhalados para controlar los síntomas, así como oxigenoterapia en casos avanzados.
En el asma, el tratamiento principal incluye esteroides inhalados y broncodilatadores, y durante las exacerbaciones pueden usarse esteroides orales y medicamentos para aliviar los síntomas.
En la fibrosis pulmonar, el tratamiento se centra en ralentizar la progresión mediante medicamentos que reducen la inflamación y previenen la formación de cicatrices en los pulmones, además de oxigenoterapia.
Suplementos alimenticios y hierbas

El consumo de hierbas, vitaminas y suplementos alimenticios con acción directa sobre el sistema respiratorio y los pulmones o con un efecto tónico general sobre el sistema inmunológico es un factor importante en la lucha contra las infecciones respiratorias agudas.
- Anís – el anís está compuesto hasta en un 70% de aceites esenciales, siendo el más significativo para el ser humano el anetol. La tintura de anís es rica en compuestos antioxidantes, antitumorales, antiinflamatorios y relajantes. Los efectos beneficiosos son más pronunciados en las afecciones del sistema respiratorio y digestivo.
- Té mursala – el té mursala es una hierba característica de Bulgaria y representa un potente antioxidante y antiséptico, con una acción tónica general, fortalecedora y desintoxicante. La hierba contiene una gran variedad de microelementos – hierro, cobre, zinc – así como macroelementos – calcio, magnesio, sodio.
- Plátano – la hierba posee un perfil bioquímico excepcional, que incluye triterpenoides, ácidos fenólicos, flavonoides, etc. Es responsable de la liberación de sustancias que causan espasmos de las vías respiratorias y una mayor reactividad de su mucosa. Esto lo convierte en un buen remedio para las afecciones asmáticas.
- Primula – el consumo de la tintura de flores de primula tiene un efecto excepcional en la salud humana y se recomienda para muchas afecciones. Las potentes propiedades antiinflamatorias de las sustancias activas de la primula se utilizan como un agente eficaz en las enfermedades inflamatorias del sistema respiratorio.

- Viola tricolor – en las flores de la viola tricolor se encuentran numerosos compuestos bioactivos orgánicos, que tienen diversos efectos en el cuerpo humano. El mecanismo de acción de la viola ha sido estudiado en detalle en relación con su efecto en el asma. La hierba puede suprimir la activación de células llamadas linfocitos T, así como la producción de compuestos químicos específicos de la inflamación.
- Vitamina C – la vitamina C participa en los procesos de reparación de tejidos, en los procesos de producción y maduración del colágeno, así como en procesos enzimáticos relacionados con la producción de neurotransmisores en el sistema nervioso central (SNC).
¿Cuándo consultar a un médico?
Es necesario buscar asistencia médica si los síntomas de las infecciones o inflamaciones respiratorias no mejoran en unos pocos días o si aparecen otros signos y síntomas graves.
Se debe buscar una consulta con un médico cuando:
- La fiebre no baja o aumenta nuevamente después de unos días – una fiebre prolongada o alta, que no responde a los antipiréticos comunes, puede ser un signo de una infección bacteriana progresiva u otra complicación.
- Tos severa y falta de aire – si la tos es intensa, dolorosa o no se detiene durante varias semanas, especialmente si está acompañada de dificultad para respirar, sibilancias o dolor torácico, puede ser un signo de una infección más grave o una enfermedad crónica.
- Disnea o dolor torácico – cualquier caso de dificultad para respirar, sensación de presión o dolor torácico debe ser evaluado inmediatamente por un médico, ya que puede indicar neumonía, pleuritis u otra afección grave.
- Expulsión abundante de pus o sangre al toser – la presencia de pus, sangre o esputo amarillo-verdoso, así como cualquier cambio inusual en el carácter del esputo, puede señalar una infección bacteriana como la neumonía.
- Dificultades para tragar o hablar – si hay dificultades para tragar o hablar, esto puede ser un signo de inflamación en la zona de la garganta o la laringe, lo que requiere una evaluación médica.
- Rápido empeoramiento de la condición o agravamiento de los problemas de salud subyacentes – si los síntomas empeoran rápidamente o si las condiciones crónicas subyacentes (como asma o bronquitis crónica) se agravan, es necesaria una consulta inmediata con un médico.
- Signos de deshidratación – en caso de vómitos, diarrea, fiebre alta e ingesta inadecuada de líquidos, que lleven a signos de deshidratación (boca seca, micción reducida), se recomienda buscar asistencia médica.
- Fatiga prolongada o inexplicable y malestar general – si los síntomas persisten más de lo esperado o se presentan con síntomas como fatiga, malestar y mal estado general, la consulta con un médico es obligatoria.
En tales infecciones, se debe prestar especial atención a la condición de los niños, los ancianos y las personas con sistemas inmunológicos debilitados (por ejemplo, aquellos que padecen diabetes, VIH u otras enfermedades crónicas). En estos casos, las infecciones pueden desarrollarse rápidamente y llevar a complicaciones graves.
En estos casos, la consulta con un médico es de particular importancia.
Preguntas frecuentes

¿Cuál es la diferencia entre una infección viral y una bacteriana de las vías respiratorias?
La diferencia radica en el agente causal y los síntomas, así como en el curso. Las infecciones virales de las vías respiratorias generalmente tienen un curso más leve, y el organismo logra combatirlas por sí solo en pocos días. En las infecciones bacterianas, es necesaria la administración de antibióticos.
¿Cuándo se debe buscar asistencia médica para las infecciones respiratorias?
En casos de fiebre alta persistente, tos productiva con expulsión abundante de pus o sangre, aparición de disnea y empeoramiento del estado general.
¿Cómo se puede reducir el riesgo de infecciones del sistema respiratorio?
Las infecciones de las vías respiratorias, especialmente de origen viral, son inevitables, pero el riesgo puede reducirse con la ventilación frecuente de los espacios habitados, evitando el contacto con personas enfermas, un estilo de vida saludable y manteniendo un sistema inmunológico fuerte.
2 comentarios
Наскоро прекарах доста тежък ларингит и осъзнах колко важно е да се вземат мерки навреме
Статията беше изключително информативна и добре структурирана. Научих много за причините и превенцията на инфекциите на горните дихателни пътища, а препоръките за билкови терапии и укрепване на имунната система са наистина ценни. Благодаря за подробната информация!
Deja un comentario